martes, 14 de junio de 2011

LA MARCHA POR LA PAZ FORTALECIÓ A GENARO GARCIA LUNA

ENFOQUE
Por Migue el Ángel Kaiseros            enfoque50@hotmail.com
ASOCIACIÓN REVOLUCIONARIA DE PERIODISTA DE COAHUILA (ARPECO)

 La marcha por la paz, fortaleció a Genaro García Luna
** No ofendan al presidente, grita Sicilia

**Los marchistas perdieron fuerza y lloraron flores

Como una flecha que se pierde al no dar en el blanco, tengo la impresión          que así se perderán los buenos propósitos de la marcha por la paz y la justicia que encabezó Javier Sicilia, desde Morelos hasta Ciudad Juárez en Chihuahua. La marcha arrancó mal porque desde  antes, Sicilia no aguantó la tentación de entrevistarse con Felipe Calderón. Esa encerrona le quitó la originalidad de fuerza social, y despertó el “sospechosismo” de que hubo arreglos bajo la mesa para suavizar los reclamos directos a Felipe Calderón.

            La sospecha de arreglo anticipado para suavizar los reclamos contra Felipe Calderón, se fortaleció cuando días más tarde el mismo Sicilia salió con su inoportuno “por favor, no ofendan al señor presidente” Esa impostura del cabecilla de la marcha cayó como ducha de agua fría en la mayoría de los que participaron en la marcha, y de muchos que sin participar directamente la apoyamos en busca de justicia y de paz para los mexicanos.

            El “sospechosismo” de arreglo en lo oscurito de Los Pinos, se hizo más evidente porque la exigencia de  los marchistas en el Zócalo de la ciudad de México, que era la cabeza de Genaro García Luna, quedó afuera del pliego petitorio. Inclusive, la exigencia sobre la salida de García Luna, ni siquiera está en los seis puntos que ahora conforman los reclamos centrales de los cabecillas de esa marcha venida a menos.

            Es muy lamentable de veras, que una marcha de cuál la sociedad se esperaba mucho, se pierda en la tibieza y en reclamos con flores y esas cosas, que sólo desorientan a la opinión general sobre lo que pudo ser un movimiento trascendente y de mucha utilidad para despertar la conciencia de un pueblo que está educado para obedecer y soportar con dogmática resignación a los malos gobiernos.

            Atrapado por la matriz informativa de Televisa, Sicilia y uno de sus más cercanos asesores se presentó con el payasito mañanero. Ahí en proyección nacional, Sicilia dijo sin sonrojarse que la marcha con sus seis peticiones, pretende sensibilizar a las autoridades para que hagan justicia. No mencionó ni por accidente, el primer reclamo que hizo, que es precisamente la salida de Genaro García Luna.

            Para los observadores no tan poetas ni tan tibios ante el d0l0r ajeno, después de la marcha el que resultó ganador y fortalecido es precisamente Genaro García Luna, hombre de absoluta confianza de Felipe Calderón. Primero, Genaro recibe una medalla de honor y reconocimiento del gobierno de Juan Manuel Santos, presidente de Colombia, primer país productor de cocaína en América del sur. Para fortalecerlo más, el mismo Felipe Calderón inventó el “Día del Policía Federal” para reconocer su “brillante” labor como benefactor de los mexicanos.

            Con esos dos reconocimientos para Genaro García Luna, la primera exigencia de los marchistas salió de la agenda de reclamos y marcó el triste rumbo de la marcha por la paz y la justicia. El pueblo una vez más pierde una grande oportunidad de alzar la voz y enfrentarse a un mal gobierno. Los mexicanos pierden así la oportunidad de buscar paz y justicia.

            Hasta pronto, pero desde nuestro ENFOQUE, no el de Televisa.

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