viernes, 26 de agosto de 2011

EL SANGRIENTO OCASO DE UN FARSANTE

ENFOQUE
Por Miguel Ángel Kaiseros
Twitter: @KaiserosM

El sangriento ocaso de un farsante

**Sin Estado no hay derecho, y sin derecho no hay Estado

** La impunidad institucionalizada seguirá campante


         El tema es obligado. La violencia en México alcanzó la categoría de terrorismo. Así lo reconoce Felipe Calderón y su séquito en esa fallida guerra militarizada. Ente ese terrorismo que algunos medios informativos tratan de minimizar para no afectar sus propios intereses empresariales, FECAL y sus mandos militares lucen derrotados y sin proponer alternativas confiables para que la sociedad vea el final de este horrendo drama de sangre y de muerte.
        
         Para medio entender ese panorama nacional de sangre y de muerte, es necesario echar un vistazo a sus causas que lo originaron y también a las causas del fracaso de Felipe Calderón que nos cobra como presidente, así como de la ineptitud de los militares que irresponsablemente lo animaron a meterse en esa aventura sangrienta, vil y nada inteligente.

         Para cualquier individuo con un dedo de frente y una razonable dosis de sentido común, es muy fácil entender el principio básico de la conducta humana que dice: lo que mal empieza, mal se desarrolla y por consecuencia, mal termina. Es el caso del mandato “presidencial” calderonista, mal empezó y está terminando peor.

         Recordemos que el mandato calderonista, empezó mal porque es ilegítimo desde el punto de vista electoral. Oficialmente, no logró superar a su adversario, Manuel López Obrador,  ni siquiera con un punto porcentual. La oligarquía lo apoyó con todo en ese fraude y las consecuencias ahora las padecemos todos, incluyendo a los oligarcas que ahora se arrepienten de haberlo sostenido en esa farsa comicial.

         Consciente pero no arrepentido de esa farsa electoral, Calderón y sus patrocinadores, entre ellos el Departamento de Estado de los Estados Unidos, concibieron el plan perverso de mandar al ejército a las calles para legitimarse con las armas, creyendo tontamente que ganarían una guerra contra carteles de alcances internacionales. Para desgracia de miles de mexicanos ahora muertos, o desaparecidos, el desarrollo de ese plan militar es inútil.

         Calderón y sus asesores mal intencionados hablan de un Estado de derecho. Bien harían la mayoría de legisladores que lo apoyan en tomar un cursito básico sobre teoría del Estado. Aprenderían que el Estado tiene cuatro pilares fundamentales: Un Territorio. Una población. Una Constitución vigente y; Un Gobierno legítimamente constituido de acuerdo a la legislación constitucional. Esto cualquier estudiante de derecho lo sabe, pero no muchos de nuestros legisladores.

         Es en la falta de acatamiento al rigor constitucional e institucional de “Gobierno legítimamente constituido” donde el mandato calderonista queda en el aire y sin fundamento legal alguno. En otras palabras, el mandato calderonista desde el arranque empezó mal, y como resultado se ha desarrollado mal y con toda seguridad terminará mucho peor, por no decir, más mal, que suena tan de poco gusto, como decir más mejor.

         Vistas las cosas con el rigor que la propia Constitución vigente impone para todos, el mandato (que no el gobierno) de Calderón, no representa al Estado Mexicano, ni el mandatario puede invocar a un Estado de derecho para los gobernados. Tenemos entonces un estado fallido porque el mandato fraudulento no se apega a la definición constitucional de Estado. Por lo tanto, Felipe Calderón no es Jefe de Estado. Su estado mayor, tampoco lo es.
        
          Pero más allá de lo ilegítimo del mandato de Calderón, la madre de todas las cusas de las desgracias de los mexicanos es la impunidad institucionalizada. Con un Gobierno ilegítimo como el que sufrimos en México, la impunidad seguirá campante para el beneplácito de los criminales.
         El ejército es el gran perdedor en este escenario de violencia. Además, el ejército no tiene sustento constitucional para seguir haciendo el ridículo, Sin soporte constitucional los militares se ubican automáticamente en el teatro de los malos, aunque su Jefe Supremo diga que son víctimas. Calderón, muchos legisladores y los militares, ignoran que: Sin Estado, no hay derecho y sin derecho no hay Estado. Sólo queda un estado fallido.
        
         Hasta pronto, desde nuestro ENFOQUE, no el de Felipe Calderón.




        

miércoles, 17 de agosto de 2011

QUE LA IMPUNIDAD A MILITARES PASE UN PLEBISCITO

ENFOQUE
Por Miguel Ángel Kaiseros    
@KaiserosM

Que la impunidad militar pase un plebiscito

** Tarea pendiente de los diputados
** La participación directa del pueblo es indispensable
         ** El único soberano es el pueblo, no las cúpulas de partidos        
           
            Si de veras no tuviera la importancia humana y política que tiene, por supuesto que no insistiría en el tema; pero la reforma a la ley que pretende dar más impunidad a la burocracia militar es inadmisible por cualquier lado que se le vea. Las cúpulas gobernantes entre ellas la Iglesia Católica, quieren retroceder a principios de siglo 18 para despacharse con la cuchara grande satisfaciendo sus intereses y despreciando las libertades del pueblo y la dignidad de las personas.
           
            Vista así, la cuestión queda en dos ejes principales: derechos humanos y despotismo teocrático militarizado. Esto resulta mucho más peligroso que los pros y los contras que por ahora se debaten para instalar cortinas de humo. El pueblo prácticamente está al margen de esa discusión nacional en la cual se juegan los derechos humanos y otras garantías constitucionales. Urge un plebiscito.

            Mientras la mayoría de los mexicanos hacemos un papel de espectadores mudos, el debate es sólo entre legisladores, y algunas organizaciones no gubernamentales, por cierto minoritarias, si las comparamos con el total la población adulta de nuestro país. El papel de los legisladores es vergonzoso, como sucede con los senadores que ya aprobaron esa minuta apátrida.

            Para colmo de tal marranada, todo parece indicar que los diputados también aprobarán esa retrógrada propuesta. Por supuesto entre los legisladores hay honrosas excepciones, pero para desgracia de México son y serán sobrepasados por la supremacía numérica de los legisladores oligarcas.

            Para infortunio de la sociedad mexicana, las llamadas organizaciones civiles no gubernamentales, ya se doblaron. Se doblaron debido a que la mayoría de ellas y sus dirigentes reciben favores de los gobiernos y parte del erario. Ya hicieron fila india para someterse al patrón. El que paga manda y no hay de otra.
           
            A través de algunas de esas organizaciones civiles no gubernamentales, operan con cuchara gigante la manipulación de la Iglesia Católica, y otras iglesias también materialmente millonarias, los banqueros y la burocracia miliar siempre al servicio incondicional de la oligarquía gobernante. Esa oligarquía está integrada por los banqueros, todos cilindrados desde el extranjero en razón de que los bancos más importantes de México son de capital extranjero.

             La historia mundial y en particular la de México nos dice que la trinidad vil y omnipoderosa que esclaviza y masacra los pueblos está integrada por tres entidades siniestras: los religiosos, los banqueros y los militares. De esas tres siniestras entidades salen la mayoría de políticos déspotas, entre ellos por supuesto, la mayoría de legisladores de todos los partidos.
           
            Sin embargo, no todo está perdido, el poeta de los besos, Javier Sicilia y las familias  víctimas de la violencia que lo siguen con determinación y valentía, insisten con toda la razón del mundo en que la minuta de la impunidad para los militares no sea autorizada por los diputados  en los términos en que pasó por el senado.
           
            La humanista y patriótica exigencia de Sicilia es apoyada por los mexicanos sin vocación de esclavos. La mayoría de los ciudadanos mexicanos también queremos y esperamos que los diputados den una muestra de inteligente dignidad, y que no autoricen más impunidad a la burocracia militar que tan graves cuentas pendientes tiene ante la nación.       

            También es urgente y necesario un plebiscito sobre ese trascendente tema. Los ciudadanos no podemos ser cómplices de los legisladores vendidos para consumar  esa ofensa a la nación. Cada mexicano tiene derecho a participar en ese plebiscito de manera directa, universal, y de cuerdo a su consciencia. Ningún mexicano con un dedo de frente y una pizca  de dignidad personal puede quedar al margen de las decisiones nacionales de tal envergadura. Lo del plebiscito lo dejamos de tarea para los legisladores.
           
            Hasta pronto, pero en nuestro ENFOQUE, no el de los legisladores oligarcas.

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miércoles, 10 de agosto de 2011

TAREA PARA ESTUDIANTES Y MAESTROS DE PERIODISMO.

Mi Opinión
Por Miguel A. Kaiseros
ASOCIACIÓN REVOLUCIONARIA
DE PERIODISTAS DE COAHUILA
        
Tarea para estudiantes y maestros de periodismo
        
         Con excelente discurso, Rafael Correa, presidente de Ecuador, encaró con sólidos argumentos a la prensa corrupta que pretende sustituir un estado de derecho por un estado de opinión, lo que no tiene lugar en un régimen de democrático. De inmediato los comentaristas a sueldo, pagados por la oligarquía, lanzaron irónicos calificativos, que no hacen más que probar que Correa, puso el dedo y su voz en la llaga.
        
         Las más airadas reacciones salieron de medios pertenecientes a la Sociedad Iberoamericana de Prensa (SIP), organismo éste comandado no por periodistas, sino por empresarios metidos a comunicadores para defender privilegios y algunos casos hacer negocios millonarios por encima de la ley y de los gobiernos. Hacen todo eso en la impunidad que les da el “poder de la desinformación”

         Más allá de la valentía del gobernante ecuatoriano, su discurso repercute en todos las países de Latinoamérica, entre ellos México, donde la SIP agrupa a los principales medios impresos, todos alineados con la ultraderecha gobernante y con empresarios que gozan de impunidad prácticamente para todo.

         El discurso de Rafael Correa, debe evaluarse y elevarse a  debates en las universidades, especialmente en las escuelas de comunicación, que en nuestros días  brotan como hongos por todas partes. El discurso de Correa, es tarea obligada para estudiantes y maestros de periodismo del mundo.

         Pero, es mi opinión... Nada más.

martes, 9 de agosto de 2011

GOLPE MILITAR A TRAVÉS DE LEGISLADORES

ENFOQUE
Por Miguel Ángel Kaiseros  
@KaiserosM

Golpe militar a través de los legisladores
** El PRI sometido con expedientes negros pendientes
** Digna oposición de diputados del PRD y del PT.

Los mexicanos estamos en riesgo de ser aplastados por las botas militares si los diputados de ultraderecha se salen con la suya aprobando las reformas a la ley de Seguridad Pública que cabildea Felipe Calderón, y que ya fue aprobada por el Senado. De aprobarse esa minuta por ahora en debate, los legisladores no sólo justificarían los abusos que el ejército comete en contra de los derechos humanos, sino que daría marco jurídico para que la burocracia militarizada prosiga la carnicería con mayor vileza en contra los ciudadanos.

            En lo personal no me sorprende esa intentona de Fecal, para dar un golpe de estado a través del Poder Legislativo. No es difícil imaginar que es uno de sus planes para mantener al ejército en las calles cubriendo en muchos casos, con sangre inocente los paisajes nacionales. Ante el fracaso de su horrorosa guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado, el inquilino de Los Pinos busca la forma de seguir la matazón humana con la complicidad de los legisladores derechistas y enemigos de la nación mexicana.

            Lo que sí me sorprende y me encoleriza, es ver la indolencia de los mexicanos para alzar la voz y oponerse a ser masacrados por la clase burocrática militarizada. Veo al pueblo mexicano vencido de ante mano, que ignora o voltea para otros lados ante la gravedad de lo que está pasando en nuestro País. No puedo entender cómo unas reformas tan aviesas hayan sido aprobadas por el Senado y que esté a punto de ser aprobadas por los diputados con la complicidad de sus respectivos partidos políticos.

            Aquí es oportuno y obligado para mí, dejar sentado con toda claridad que no todos los diputados, ni todos los partidos políticos están dispuestos a aprobar semejantes barbaridades legislativas. El Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido del Trabajo (PT) se oponen con valentía y una visión libertaria que dan dignidad al pueblo de México.

En contra parte, mi partido, el PRI, luce tibio e indefinido ante ese enorme reto legislativo que le exige lealtad a la nación que no merece ser pisoteada por las botas militares. Del PAN mejor no digo nada, si tomamos en cuenta que fue la ultraderecha que en él milita, la que trajo a Maximiliano a imponer un imperio y a asesinar a miles de patriotas mexicanos con ejércitos extranjeros.

Crece en corrillos populares, la fundada sospecha que el PRI a través de su consejo directivo, ya pactó con Felipe Calderón y la ultraderecha nacional y extranjera, ser blandito, complaciente y obediente, para darle luz verde a la reforma de marras. Se sospecha que los EXPEDIENTES NEGROS, que tiene listos el Gobierno federal para llamar  a cuentas a distinguidos políticos, dieron los efectos que desde Los Pinos esperan.

De ser así, los mexicanos estamos ante una jugada sucia que no tiene precedente, con la cual no sólo se traiciona a la militancia priísta, se traiciona a la nación entera a cambio de una impunidad descarada que a todos los mexicanos ofende. En lo personal espero que esas sospechas no se hagan realidad. Espero al mismo tiempo que los diputados priístas se opongan con todo a esa reforma de ley que resulta oprobiosa por cualquier lado que se le vea.

Cerraré mi modesto comentario, pesando que si Juárez, que tuvo las agallas de firmar el fusilamiento de Maximiliano y sus dos cómplices traidores a la Patria, pudiera ver lo que los diputados priístas y los panistas están a punto de hacer, seguramente se volvería a morir desde el otro mundo donde se encuentra desde hace ya muchas legislaturas. Hasta pronto, desde nuestro ENFOQUE, no el de la ultraderecha.

lunes, 8 de agosto de 2011

GOLPE MILITAR A TRAVÉS DE LEGISLADORES

ENFOQUE
Por Miguel Ángel Kaiseros  
@KaiserosM

Golpe militar a través de los legisladores
** El PRI sometido con expedientes negros pendientes
** Digna oposición de diputados del PRD y del PT.

Los mexicanos estamos en riesgo de ser aplastados por las botas militares si los diputados de ultraderecha se salen con la suya aprobando las reformas a la ley de Seguridad Pública que cabildea Felipe Calderón, y que ya fue aprobada por el Senado. De aprobarse esa minuta por ahora en debate, los legisladores no sólo justificarían los abusos que el ejército comete en contra de los derechos humanos, sino que daría marco jurídico para que la burocracia militarizada prosiga la carnicería con mayor vileza en contra los ciudadanos.

            En lo personal no me sorprende esa intentona de Fecal, para dar un golpe de estado a través del Poder Legislativo. No es difícil imaginar que es uno de sus planes para mantener al ejército en las calles cubriendo en muchos casos, con sangre inocente los paisajes nacionales. Ante el fracaso de su horrorosa guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado, el inquilino de Los Pinos busca la forma de seguir la matazón humana con la complicidad de los legisladores derechistas y enemigos de la nación mexicana.

            Lo que sí me sorprende y me encoleriza, es ver la indolencia de los mexicanos para alzar la voz y oponerse a ser masacrados por la clase burocrática militarizada. Veo al pueblo mexicano vencido de ante mano, que ignora o voltea para otros lados ante la gravedad de lo que está pasando en nuestro País. No puedo entender cómo unas reformas tan aviesas hayan sido aprobadas por el Senado y que esté a punto de ser aprobadas por los diputados con la complicidad de sus respectivos partidos políticos.

            Aquí es oportuno y obligado para mí, dejar sentado con toda claridad que no todos los diputados, ni todos los partidos políticos están dispuestos a aprobar semejantes barbaridades legislativas. El Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido del Trabajo (PT) se oponen con valentía y una visión libertaria que dan dignidad al pueblo de México.

En contra parte, mi partido, el PRI, luce tibio e indefinido ante ese enorme reto legislativo que le exige lealtad a la nación que no merece ser pisoteada por las botas militares. Del PAN mejor no digo nada, si tomamos en cuenta que fue la ultraderecha que en él milita, la que trajo a Maximiliano a imponer un imperio y a asesinar a miles de patriotas mexicanos con ejércitos extranjeros.

Crece en corrillos populares, la fundada sospecha que el PRI a través de su consejo directivo, ya pactó con Felipe Calderón y la ultraderecha nacional y extranjera, ser blandito, complaciente y obediente, para darle luz verde a la reforma de marras. Se sospecha que los EXPEDIENTES NEGROS, que tiene listos el Gobierno federal para llamar  a cuentas a distinguidos políticos, dieron los efectos que desde Los Pinos esperan.

De ser así, los mexicanos estamos ante una jugada sucia que no tiene precedente, con la cual no sólo se traiciona a la militancia priísta, se traiciona a la nación entera a cambio de una impunidad descarada que a todos los mexicanos ofende. En lo personal espero que esas sospechas no se hagan realidad. Espero al mismo tiempo que los diputados priístas se opongan con todo a esa reforma de ley que resulta oprobiosa por cualquier lado que se le vea.

Cerraré mi modesto comentario, pesando que si Juárez, que tuvo las agallas de firmar el fusilamiento de Maximiliano y sus dos cómplices traidores a la Patria, pudiera ver lo que los diputados priístas y los panistas están a punto de hacer, seguramente se volvería a morir desde el otro mundo donde se encuentra desde hace ya muchas legislaturas. Hasta pronto, desde nuestro ENFOQUE, no el de la ultraderecha.